Ya era hora! Por fin se ha declarado el circo romano de interés cultural! Así podremos seguir disfrutando de esta maravillosa fiesta en la que unos leones devoran a unos cristianos o unos gladiadores se matan unos a otros.
Y es que son muy cansinos los que dicen que los cristianos tienen derechos como todos. Pero dónde se ha visto tanta tontería? Los cristianos están hechos para encerrarlos y luego lanzarlos al circo romano. Si no existiera el circo, no tendrían razón de existir.
Pero, por desgracia, aún hay que recuperar algunas fiestas que algún burócrata sin escrúpulos nos ha quitado como el de sacrificar vírgenes a los dioses o la de leer las entrañas de un cordero acabado de sacrificar.
País de locos…
p.d. supongo que entendéis la ironía, no? (sin ganas de ofender a nadie, ok?)