¡Ya tengo mis Rollerblade Marathon Carbon!

¡Por fin he recibido de Inercia mis Rollerblade Marathon Carbon! Si habéis visto otros posts, sabréis que tenía ciertas dudas, pero aún así me he arriesgado. Me explico: aunque los quiero usar para rutas largas, sólo llevo un año y medio patinando, mi nivel es “intermedio”, y estoy acostumbrado a patines de fitness con ruedas de 82, de hockey con ruedas de 80, y de freeskate 80-80-74-74. Mi técnica no es exactamente de élite, y tenía algo de miedo por los problemas de pasar de esto a un patín de Maratón con rueda de 100. Os cuento las primeras impresiones

Presentación: se suminstran en el embalaje estándar de RB (creo), con los patines en bolsas individuales. Con la caja se suministra el freno de taco (cuyo uso no discutiré aquí), varios tornillos de repuesto y una llave allen. La caja lleva una bolsa de gel de sílice para absorber la humedad.

Al sacarlos de la caja, la sensación es muy buena. ¡Son impresionantes! Los acabados son en general muy buenos. El chasis es espectacular, los plásticos y los elementos textiles y metálicos parecen de buena calidad, y las costuras y remates tienen un aspecto excelente. Afinando mucho, en la parte de carbono podría usarse una resina transparente, y el adhesivo de los refuerzos laterales a la suela tiene algunas rebabas.

Estética: Sobre gustos no hay nada escrito, pero el diseño de los patines me gusta. Me ha sorprendido el color “rojo satén” de algunas partes de la bota. En realidad es un metalizado a juego con el chasis, de lo más guay.

Ajuste: La bota es comodísima. Los cordones, aunque parecen un poco “sencillos” (será mi ignorancia) resultan fáciles de apretar y abrochar, y mantienen bien su posición. Mucho mejor que los redondos de Salomon (y no digamos los Decathlon), y mucho más cómodos de ajustar que los de hockey (que son mucho más gruesos).
La carraca del strap tiene un tacto un poco endeble, y a veces salta el trinquete mientras se aprieta. Supongo que el afán de reducir peso les habrá llevado a ese diseño. También es cierto que estoy acostumbrado a los magníficos (y grandotes) cierres de aluminio de los Salomon Crossmax, y a los robustos y fiables cierres de los K2 que a veces le “descuido” a mi mujer. Una vez ajustados, no me han dado ningún problema.

En marcha: A baja velocidad, por el pasillo de mi casa, la sensación es “¡no giran!”. Para cambiar de dirección, hay que hacer como cuando se llevan esquís en parado. En la calle, la sensación cambia completamente. Mi casa está al final de una cuesta, y la he subido como un tiro. Me ha resultado más sencillo concentrarme en mantener la técnica, dentro de mis (grandes) limitaciones. En llano, son una gozada: ruedan muy rápido y con mucha suavidad, y las irregularidades del asfalto apenas se notan. En una de las calles de mi barrio, hay unas pequeñas “bandas sonoras” (de unos 2 centímetros, sin escalón) que con ruedas de 82 me cuesta pasar “elegantemente” (salvo saltando). Con la rueda de 100, las paso de forma mucho más fluida.

Al intentar giros sobre los cantos exteriores, con cierta prevención por la dificultad encontrada a baja velocidad, la sensación de control es buena. Desde luego, no giran como unos de fitness normales, pero aplicándose más a fondo, se pueden hacer giros relativamente cerrados sin ninguna dificultad. Forzando mucho el giro (sobre todo cuesta abajo), noto como pivotan sobre la 3ª rueda, pero es sin duda un defecto de mi técnica.

«Haciendo el tonto» (equilibrio sobre un pie, transciones) a baja velocidad , me he dado algún susto y casi pierdo el equilibrio (de hecho, me he ido al suelo una vez, sin consecuencias). Nada que no se solucione… flexionando más las rodillas.

Al cabo de un rato, he empezado a notar sobrecarga en la planta del pie (otra sensación que tenía olvidada). Supongo que se deberá al mayor brazo de palanca del chasis/ruedas, a la mayor fuerza que tengo que hacer en los giros , y a que la bota de maratón y la caña más baja obliga a trabajar más con la planta del pie.

Conclusión: si en la primera salida ya me he divertido y he podido trabajar la técnica, creo que los pequeños inconvenientes los puedo resolver con entrenamiento. No obstante, este patín está MUY por encima de mi nivel físico y técnico, y es muy posible que para la mayoría (yo incluído) sea más razonable y suficiente pasar antes por un buen patín de fitness avanzado con ruedas de 90. Yo, por una vez, me he saltado una etapa. Si me he equivocado, lo sabréis en este foro…