Patinar de noche es una práctica muy habitual para la mayoría de patinadores debido a que hay menos tráfico, se está más tranquilo y hace menos calor. Pero por otra parte se es mucho menos visible al tráfico, con lo cual se incrementa el riesgo. Hay algunas soluciones como ponerse un peto reflectante que da mucho calor, ponerse luces de bici, que nunca sabes dónde colgártelas o ponerse ruedas que al girar se iluminan, pero que pesan más que unas normales y son de inferior calidad. Sin embargo ha llegado una nueva solución que, a parte de ser muy llamativa, nos permitirá no pasar desapercibidos y ganar en seguridad. El invento en cuestión se llama Bladelight y está basado en tres leds, dos de color azul-neón y uno de color rojo, conectados a una pila de 9 voltios. Para no tener que llevarlos siempre colgando, la pila se aloja dentro de una bolsita con un asa con un velcro y las luces también se unen por velcro al patín. Así en pocos segundos podemos colocarnos todas las luces o quitárnoslas. Las luces son resistentes al agua y tienen una autonomía superior a 30 horas. El pack consta de dos grupos de 3 luces y una bolsa para guardarlos. El peso sin la pila es ridículo, así que casi no nos daremos cuenta que lo llevamos. Su precio es de 34,95 euros. No encontramos que sea un precio caro visto el resultado que dan. En conclusión, un invento muy recomendable para los ruteros nocturnos o para los que deseen ser el centro de las miradas.
Para más información: www.bladelight.de